Cómo superar la muerte de un padre. ¿Qué cosas se pueden hacer para afrontar esta situación tan difícil? ¿Qué es esperable que suceda durante el proceso? ¿Cuáles son las fases del duelo?
NOTAS CLAVE:
- ¿Cómo superar la muerte de un padre? Tendremos que pasar a través del proceso de duelo.
- El duelo tiene diferentes fases, desde la negación hasta la aceptación, pasando por diferentes estados.
- Para gestionar esta situación, será absolutamente necesario transitar por diferentes estados emocionales que nos conducirán a la aceptación.
Cómo superar la muerte de un padre
La muerte forma parte de nuestra vida, y a pesar de ser muy conscientes de esta información, perder a un padre es una situación que nos puede conllevar a un profundo sufrimiento. Afrontar la muerte de una persona tan cercana, como puede llegar a ser un padre o una madre, puede ser una tarea ardua y que perdure un largo tiempo hasta poder hacerlo correctamente.
Todo el proceso que vamos a pasar para superar la muerte de un padre recibe el nombre de duelo. El duelo es el proceso por el que todas las personas pasamos cuando sacamos a una persona de nuestra vida. No necesariamente ocurre únicamente cuando sucede el fallecimiento de una persona querida, sino también cuando rompemos una amistad, vivimos un divorcio, perdemos un trabajo… No obstante, la diferencia de cómo nos afecta radica en la potencia de las emociones que podemos vivir y en las consecuencias que pueda tener en nuestro día a día.
Las fases del duelo
Como veníamos diciendo, el duelo es un proceso natural por el que pasan las personas ante la pérdida de una situación o persona querida en sus vidas.
Es frecuente que, si estás en la necesidad de superar la muerte de un padre, estés sintiendo emociones muy fuertes y transitando por diferentes estados. Queremos hacer hincapié en que todas estas fases y emociones son, en la mayoría de los casos, un proceso natural y necesario para alcanzar la aceptación y acomodación de la nueva situación. Las diferentes fases del duelo son las siguientes:
- Negación. Esta es la fase inicial del duelo, y surge a través del shock primario que sentimos al conocer el fallecimiento de nuestro familiar. La negación no tiene que ver, curiosamente, con el hecho de «no creerse lo que está pasando». Más bien, es una forma que tiene nuestro cuerpo de protegernos del impacto y del dolor que puede tener esta noticia. Es, pues, un mecanismo de protección necesario de nuestro organismo, frente a una situación altamente estresante.
- Enfado. Después del dolor profundo inicial, vienen diferentes etapas de emociones intensas muy diferentes. La primera es el enfado, que tiene que ver con esa búsqueda de respuestas a todos los «por qués» que nos surgen. Es común que no solo se busquen explicaciones, sino culpables. Nuevamente, se trata de un estado necesario para que nuestro cuerpo y nuestro cerebro puedan gestionar toda esta información tan impactante.
- Negociación. Esta fase tiene que ver con el hecho de fantasear con otras situaciones que pudieran haber ocurrido: cosas que podrían haberse hecho de otra forma, situaciones que pudieran haber desembocado en otro tipo de final… La negociación es una fase en la que se está comenzando a aceptar lo ocurrido, y se está integrando en nuestro cuerpo de tal forma. Es común que en esta fase se alcancen acuerdos de tipo religiosos o espirituales, para seguir avanzando en la aceptación y poder superar la muerte de un padre.
- Depresión. A pesar de que esta fase sea denominada depresión, no quiere decir que sea natural que desarrollemos este trastorno del estado de ánimo. Hace referencia, más bien, a que nuestro organismo está digiriendo que, efectivamente, hemos perdido a una persona importante de nuestra vida. Es el momento en el que sí que somos capaces, no como en la etapa inicial, de adentrarnos en esas emociones dolorosas, de forma intensa, que nos trae el hecho de haber perdido a alguien importante. Es habitual la profunda tristeza –de ahí el nombre de la etapa–, la sensación de vacío, o el sentimiento de soledad.
- Aceptación. Finalmente, cuando somos capaces de gestionar todas estas emociones anteriores, comenzamos a adaptarnos a nuestra nueva forma de vida.
Qué se puede hacer para superar la muerte de un padre
Para superar la muerte de un padre, será absolutamente necesario pasar por todas estas fases del duelo. Pero, ¿Qué podemos hacer para tratar de hacerlo más sencillo? ¿Para poder gestionar nuestras emociones, que son tan difíciles, de una forma más fácil? ¿Cómo ayudamos a alguien que está pasando por esto? Será importante:
- Hablar sobre la muerte de esta persona. Crear una red de apoyo será indispensable para poder gestionar de una forma adecuada.
- Trata de expresar todas las emociones de una forma asertiva. Negarlas o frustrarlas entorpecerá el pase de las fases del duelo.
- Tratar de fomentar el autocuidado, por ejemplo a través de la realización de actividades placenteras, para evitar que todo nuestro día se centre en superar la muerte de un padre.
- Rememora, celebra, recuerda. Siempre formará parte de tu vida, aunque ahora lo haga de una forma diferente.
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Autora de la nota: Yolanda Carmona