Tiempo de lectura: 4 minutos

Poner límites, ¿Alguna vez has sentido que necesitabas hacerlo? ¿Conoces alguna forma o guía para poder hacerlo de una forma sana, sin que haga daño a los demás o a ti misme?


 

Guía para poner límites

Es posible que a lo largo de tu vida te hayas encontrado con situaciones y con personas que te hayan hecho replantearte cómo has llegado hasta ahí y por qué tú estás haciéndote cargo o qué tiene que ver contigo. En muchas ocasiones, nuestra personalidad y la necesidad de ayudar a los demás o complacerles nos hace tomar tareas, decisiones o tener encuentros que realmente no deseamos, porque no somos capaces todavía de poner límites.

Puede parecer agresivo, dañino y perjudicial para el resto de las personas, a priori. Sin embargo, poner límites es algo que tiene muchísimos beneficios y que potenciará tanto tu autoestima como el respeto hacia ti misme. Desde luego, también podrás encontrar beneficios para los demás desde tus propios límites, como la potenciación de la autonomía, que los demás sean conscientes de hasta dónde pueden llegar y no tengan que pasar por la situación embarazosa de encontrarse con una negativa…

A continuación, vamos a ver una breve guía para poner límites. ¿Quieres empezar a poner en práctica tan pronto como sea a dibujar esta fina línea que delimitará tu espacio tanto físico como emocional? ¡Vamos a ello!

 

 

Una breve guía para aprender a poner límites

Recuerda que poner límites no es algo que funcione de un día para otro. Se trata de un proceso paulatino y que requiere de aprendizaje. Tómate tu tiempo y aprende de las experiencias con las que te vayas encontrando poco a poco. Y, eso sí: no te fuerces a dar pasos a los que todavía no puedes llegar.

¡Date el permiso de ir poco a poco en esta experiencia! Así es como conseguirás que sea de una forma sana y sin hacerte daño.

 

Autoconocimiento: Establecer cuáles son tus límites

Es primordial que, para empezar, nosotres mismes seamos conscientes de dónde queremos poner límites y qué situaciones los definen. Tratar de establecer estas líneas imaginarias sin tener ni idea de en qué situaciones o en qué relaciones establecerlas sería empezar un poco a lo loco. Sería como empezar a construir una casa pensando en la alfombra que vamos a ponerle a nuestro perrito. Debemos empezar por los cimientos, ¿no?

Piensa y reflexiona:

  • En qué situaciones estás notando que necesitas poner límites.
  • Con qué tipo de vínculos necesitas establecer esta línea imaginaria: Pareja, amistades, familiares, compas del trabajo…
  • Qué pretendes conseguir tras establecerlos, como por ejemplo: seguridad, estabilidad emocional, no tener pérdidas (económicas, sociales, emocionales, de cualquier otro tipo)

 


💥BONUS: Poner límites a tu pareja, ¿Cómo empezar?

 

Es la hora de poner límites: en primer lugar, contigo misme

Como lo lees, la primera persona con la que debes aprender a poner límites es contigo misme. Que, ¿De qué estamos hablando?

¿Cuántas veces has hecho cosas por tu propio beneficio? ¿Podrías decir que no te obligas a hacer cosas que realmente no quieres hacer y frustras tus deseos? ¿Haces cosas por ti y luego te culpas? A esto es justamente a lo que nos referimos. Algunos ejemplos de poner límites contigo misme pueden ser:

  • No pasar trabajando más horas de las que hay en tu contrato laboral.
  • Darte un capricho por tu propio placer, de vez en cuando. Tú también lo mereces.
  • Da tu opinión, no te la calles por lo que puedan pensar los demás.
  • Trabaja la culpa por la que SEGURO que vas a pasar cuando comiences a dar tus primeros pasos en esto de poner límites.

 

 

Trabaja la comunicación para poder poner límites

Este es un aspecto muy importante y que muchas personas pasan por alto. Establecer límites y acogerte a ellos, ya sea por tu salud mental o por cualquier otra circunstancia por la que de veras necesites agarrarte a ellos, no es cometer sincericidios o hacer daño a otras personas por la forma en la que los comunicamos. Debes tener siempre presente la responsabilidad afectiva.

Potencia al máximo la asertividad y la comunicación asertiva, esta será la clave para poder comunicar tus límites a las demás personas sin hacerte daño ni a ti ni a les otres.

 


💥BONUS: Responsabilidad afectiva, ¿Qué es?

 

Es hora de poner límites con los demás

Ahora que ya has formulado los límites contigo misme y has pensado en qué tipo de límites, con qué tipo de personas y cómo quieres hacerlo, es la hora de comunicarlo. Algunos consejos a la hora de poner los límites y establecerlo comunicativamente con los demás son:

  • Mantén un discurso claro y directo.
  • Trata de ser coherente y consistente, si haces cambios de un día para otro, no se va a respetar.

 


💥BONUS: Comunicación en la pareja, ¿Cómo mejorarla?

 

Si necesitas ayuda terapéutica para poner límites en tus relaciones, ya sean de pareja, familiares, laborales o con tus amistades, puedes contactar con nosotres. Hazlo a través del número 615095769 y te asesoraremos de forma profesional. Otra opción, es agendar cita con Montse Iserte:

Montse Iserte – Doctoralia.es

Autora de la nota: Yolanda Carmona